La ocasión para contratar a un fotógrafo para hacer una sesión familiar puede ser por motivos especiales, como la navidad, un cumpleaños o un nacimiento, o puede ser una simple excusa para pasar tiempo de calidad y, de paso, obtener hermosos recuerdos. Sin embargo, lo más normal es que los niños no se sientan muy entusiasmados con la idea de arreglarse, peinarse, levantarse temprano ni ir a posar y fingir sonrisas frente a un desconocido. ¿Qué podemos hacer al respecto?
Film&Photo Club
Cuida su ropa
A pesar de que quieras hacerlos lucir lo mejor posible, una sesión de fotos no es el momento ideal para estrenar ropa. Los niños no suelen ser fanáticos de vestir elegantes porque muchas veces esto implica que mamá les estará recordando continuamente que no deben ensuciarse, que deben sentarse bien, que no deben desfajarse ni despeinarse. Si vuelves todo el ambiente al rededor de las fotos un motivo de regaños y estrés, tus hijos asociarán las fotos familiares con problemas y malos ratos. ¿La solución? Trata de aceptar las cosas como vienen. Los niños son niños. Van a correr, a sudar, a arrugar la camisa.
Una opción es vestir todos de forma casual o cambiar a los niños pocos minutos antes de las fotos, así no tendrán que soportar horas antes de poder volver a ser ellos mismos. Olvida el estrés, tus hijos no necesitan ser perfectos ni lucir impecables. Los fotógrafos preferimos niños felices que niños elegantes.
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Se realista con la tolerancia de tus hijos
Los niños difícilmente estarán interesados en cooperar para tener fotos perfectas. Esta bien, son niños, aún no entienden el valor de tener un retrato lindo con la abuela. Trata de involucrarlos en el proceso, dales una "misión" o una buena razón para sonreír. Piensa que, si llevas regañándolos toda la mañana, el ambiente para risas y felicidad estará arruinado. Tampoco los obligues a posar, a tener una expresión específica o comportarse de una manera que no es natural a su forma de ser. Si son tímidos, puedes tener hermosas fotos de una mirada fugaz, si son extrovertidos, se pueden hacer increíbles fotos de esa chispa.
Si tus niños necesitan un descanso, no hay problema, dale un dulce, tomen agua, habla con ellos tranquilamente y permíteles relajarse. Muchos fotógrafos pueden obtener imágenes muy interesantes de estos momentos también.
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Olvida las apariencias
Abre las posibilidades. No todas las fotos tienen que ser posadas ni perfectas, mucho menos cuando hay niños de por medio. Un buen fotógrafo de niños sabrá darle variedad a las tomas para que los pequeños no se aburran y, al contrario, puedan ver las fotos familiares como un momento de juego y felicidad. Jueguen, háganse cosquillas, cuéntense chistes, dense besos. Esas fotos son mucho más divertidas de ver y te harán sonreír al paso de los años.
Contratar a in fotógrafo con quien se sientan cómodos y sea bueno en su trabajo va a ayudar inmensamente. Una sesión de fotos familiar no necesita tomar mucho tiempo ni esfuerzo, simplemente debe nacer del amor que se tienen. En Film&Photo Club somos expertos en crear hermosos momentos naturales con tus niños, estaremos felices de saber de ti.
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